Apasionado del agua desde que nací y habiéndome criado en Castilla, pasé por diferentes entornos siempre intentando exprimir al máximo aquello que me proponía hacer, conocer o estudiar. Presente en lo que vivía, pero siempre sintiendo una llamada a la que aún no le daba forma. A mitad de mis estudios de comunicación audiovisual, me propuse hacer el curso de buceador de aguas abiertas y algo muy potente empezó a gestarse en mí. La vida te da muchos caminos y hay que mantener los ojos y el corazón abiertos para elegir y caminarlos, y aparecía ante mí uno que no era como los demás. Por suerte encontré con quién rodearme de la misma pasión que yo sentía por el océano y disfrutando como nunca, enseño a bucear a la gente que me da la oportunidad. Esa pasión para mí tiene la forma de Blue Magma y el equipo de entusiastas que le dan vida. Por eso La Palma cada vez es más mi hogar, y al separarme del intenso azul del Atlántico sufro como un isleño más.